sábado, 28 de abril de 2007

TODO AL REVÉS


En momentos en que en Capital Federal, Alfredo Bisordi, titular de la Cámara de Casación Penal, decía que -para el presidente- “El real interés es sacar de la Cámara a los jueces que no le son afines y que pueden comportarse de modo independiente en las causas de corrupción que se avecinan", en nuestra provincia, el Fiscal de la X instrucción, Guillermo Herrera, archivaba una causa en contra del Secretario de Comunas y Municipios, Sergio Mansilla, por incumplimiento de los deberes de funcionario público que iniciaba Ariel García -UCR- debido a la mora de las comunas en la entrega de los balances bimestrales correspondientes -86 de las 93 comunas no cumplían con la rendición de cuentas -

Aún cuando la constitución nacional, en su artículo 120, lo resguarde otorgándole autonomía funcional y autarquía financiera e intangibilidad en sus remuneraciones, el Ministerio Público fiscal, al menos en Tucumán, pareciera estar lejos de "promover la actuación de la justicia en defensa de la legalidad de los intereses generales de la sociedad".

El mismo fiscal que, meses antes había ordenado la detención de un delegado comunal, ahora se sonrojaba y le temblaba el pulso a la hora de solicitar igual medida para con el Secretario de Estado; ni siquiera lo citó a declarar. Mansilla, mediante escrito, había pedido que se archive la causa, a lo que Herrera accedió con total aplomo. En su resolución, justificaba la desición expresando que "La Secretaría de Coordinación con Municipios y Comunas no tiene la obligación de exigir a las delegaciones rurales que rindan cuentas del manejo de los recursos públicos. Esa tarea le compete únicamente al Tribunal de Cuentas". ¿Será la impunidad, acaso, uno de los intereses generales de la sociedad a los que el artículo 120 de la Constitución Nacional, hace referencia?¿Desconoce, el Fiscal Herrera, que uno de los pilares del Sistema Republicano de Gobierno es la responsabilidad de los funcionarios públicos?.

Legislativo distraído
Días antes de la interna peronista, legisladores, tanto juristas como opositores, aseguraban por cuanto micrófono se le cruzara, llegando a copar páginas enteras de diarios locales, que llevarían al recinto a Mansila para que rinda cuentas de su actuación al frente de la secretaría a su cargo. Paso la interna, la legislatura no volvió a sesionar, en consecuencia, a Mansilla tampoco se lo llevó al banquillo. Ahora, los parlamentarios miran a otro lado, sólo piensan en Agosto, en sus reelecciones. Como siempre, es tarde para representar a quiénes deberían ser sus representados.

¿El único valiente?
Legislativo y Judicial, demostraron continuar siendo funcionales a la impunidad, serviles a los gobernantes de turno, temerosos en sus acusaciones y vacilantes a la hora de controlar a los "poderosos". En Tucumán, Algo anda mal.

Bisordi, el magistrado de la cámara de casación, es un ejemplo de coraje. A sabiendas de que sus palabras van a influir inexorablemente en el dictamen final del Consejo de la Magistratura, que lo acusa por mal desempeño, no mostró pelos en la lengua al momento de decir que "Quieren sacar a los jueces que no les ofrecen garantías”.

Nuestra provincia y la nación, necesitan de magistrados probos que se encarguen de recordarles a Alperovich, Mansilla, Kirchner, entre otros, que el feudalismo terminó hace años, que a los monarcas absolutos se lo echó con una revolución, que Luis XIV ya no existe y que ellos no son patrones de estancias sino administradores. Impera, en tanto, la necesidad de una justicia justa, que no se saque la venda ni desequilibre la balanza cuando le toquen la puerta.

Herrera y Bisordi son las dos caras de lo que debiera ser una misma moneda: La Justicia

No hay comentarios: